Los conflictos interpersonales son inevitables. Las personas somos muy complejas y los problemas pueden surgir por muchos motivos, en la familia, con los amigos, en el trabajo o en la pareja. Aprender a identificar nuestras necesidades y nuestros límites, atenderlos y saber expresarlos, nos ayuda a lidiar mejor con ellos y a tener relaciones más saludables.

A la vez, sentirnos fuertes, independientes y con capacidad de afrontar con éxito una ruptura si es la mejor opción, evita que nos situemos en las relaciones en una posición que ya de por sí supone un obstáculo para ellas y las daña.

El proceso de conocerte mejor, comprenderte y quererte tal como eres, apoyarte en lo mejor que tienes y fortalecerlo, te dará la oportunidad, no solamente de establecer relaciones más sanas y placenteras, sino de sentirte mejor en otros ámbitos. Ganarás seguridad en ti, confianza en tus recursos y el impulso necesario para seguir desarrollándote y mejorando tu vida en cualquier faceta.